No avergonzar a un hermano en la Fe.

No odiarás a tu hermano en tu corazón; ciertamente reprenderás a tu prójimo y no portarás pecado a causa de él. (Levítico 19:17)

Explicación del mandamiento:

No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; razonarás con tu prójimo, para que no participes de su pecado. No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, si no amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo el Eterno. (Levítico 19:17-18)

Nos habla de no avergonzar a nuestro hermano, cuando hay en nuestro corazón la disposición para reprender a un hermano, lo tenemos que hacer con toda la delicadeza, con calma y sobre todo con amor, porque no sabemos si hay un hermano nuevo, si está apenas aprendiendo, si está llevando su camino de la forma correcta de acuerdo a lo que la Torá nos instruye, por ello nosotros no podemos enjuiciar la vida de los hermanos si en realidad no sabemos cuanto tiempo llevan en la fe. Y aun así, nosotros no estamos alejados de caer, siendo de nivel avanzado. 

Por eso estamos como hermanos, como amigos de la fe, para alentar al hermano a seguir las enseñanzas y los estatutos que se nos han decretado. No podemos avergonzar o tratarlo de forma brusca, aunque tenga un comportamiento alejado a lo que nos manda La Palabra.

Debemos alentarlos en amor para que ellos se sientan en la libertad de retomar el camino, en caso de que se hayan extraviado, pero todo lo debemos hacer con amor y con cariño para que ellos sientan la calidez. Incluso reprender a un hijo de manera brusca es incorrecto, sino que lo debemos hacer con amor.

El código que nos está enseñando este versículo es el no avergonzar a un hermano de la Fe.

Y el siguiente versículo que dice No te vengarás, ni guardaras rencor a los hijos de tu pueblo, si no amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo el Eterno.

Éste habla de la venganza y del rencor. La venganza desde cualquier punto que lo veamos es negativo, antisocial, nosotros no podemos hacer venganza de lo que podamos tener en nuestro corazón, y en determinado momento a apartarnos de la palabra de Dios.

La Torá no solo prohíbe el acto de cobrarle, sino también guardarle resentimiento, ya que la persona que guarda resentimiento puede realizar actos de venganza, por ello la Torá quiere que la persona contenga su resentimiento, hasta que el daño que le haya hecho el prójimo se le haya olvidado completamente. Este es el sentido de este versículo de no de te vengarás, ni guardarás rencor, este es el código de conducta que debemos seguir, no atesorar en nuestro corazón rencor, ni venganza, porque es completamente anti Torá o anti Bíblico.

Dios quiere que demostremos amor a través de nuestros actos, en nuestras actitudes, hacia nuestros hermanos y más a nuestros hermanos en la fe, también a nuestros hijos y amigos. 

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“El que recibe enseñanza en la palabra, haga partícipe de toda cosa buena al que lo enseña”

Gálatas 6:6 (RVC)